jueves, 24 de enero de 2019

El que no siente no aprende

Con la muerte de una figura materna vienen cosas muy feas. A corto o a largo plazo. Tenés a corto plazo la repartición de bienes, el funeral, el que hacer con las cosas de esa persona, miles de personas acompañándote que solo te recuerdan el dolor que sentís. O sos como yo que ni vas al velorio para no aceptar la realidad. Que un día después de esa muerte te presentas a rendir el first como si nada, y la rompés. Va, la rompés. Me saqué una B pero para mi eso esta bien. Re cínica caí yo a rendir. Como si estuviese todo bien. Peeeeero no sufrir el corto plazo hace que #obvio te pegue más al largo plazo y eso me pasó a mí. Te das cuenta de que te rodeas de un circulo hermoso. Amigos, familia, pareja. No estas sola. Mi terapeuta por suerte me adora y siempre puedo hablar con ella cuando lo necesito. También lo tengo a mi papá que lo amo, y por suerte me llevo muy bien con el y nos reímos mucho. En fin, estoy rodeada de gente que me ama y no puedo pedir nada más (mas que una madre xd). Tengo plata, estudio lo que me gusta donde me gusta, como rico, nunca me falto techo ni comida. Hago muchos viajes. Una persona que no sabe mi historia me podría envidiar. Lo único que me falta en la vida es una mamá. Para las cosas graves y para las boludeces. Podría desarrollarme pero esta no tiene que ser una entrada triste. Tengo un montón de cosas lindas en mi vida, en resumen. A eso va la entrada. Y lo bueno de haber perdido una mamá es que, aunque suene muy cursi y cliche, empezas a valorar más las cosas, posta. Empezas a valorar la comida casera, empezas a valorar la esi que recibís por parte de otras mujeres (ni ahi le hablo a mi viejo de sexo). Y te hace dar cuenta de todas las cosas lindas, que parecen boludeces, que otras personas hacen por vos. Que son gestos chiquitos pero significan cosas grandes. Obvio que también aprendí a independizarme un monton y creo que eso me hizo crecer una bannnnda. Desde aprender a ponerse un tampon sola (que no lo hice pero ya me voy a animar), aprender a maquillarse sola, a cocinarse sola, a poder estar físicamente sola mucho tiempo y a vivir conmigo misma. Creo que estoy emocionalmente preparada para irme a vivir sola. Igual no lo quiero hacer todavia. Es lindo vivir con papá. Y bueno no tengo trabajo pequeño detalle. Cuestión que nada, incluso las cosas mas dolorosas de la vida tienen un lado bueno, siempre terminas aprendiendo. Aprendes a ser feliz con las cosas chiquitas. Siempre me pregunté porque me tuvo que pasar a mi. Y por que me tocó, y listo. A sacarle provecho. Todas las personas tienen problemas graves, ya sea con la familia o la pareja o la salud o la economía o los amigos o la mascota o lo que sea. Que bueno que a mi no me tocó todo el resto. Ahora a buscar más felicidad en otras partes. Y a charlar los problemas. O escribirlos. Escribir libera un montón. Sana. O eso intenta. Relax baby. 

Tales of a niña en cuerpo de adolescente

- Pero...va a estar para mi fiesta de 15, ¿no?
- No sé Cami... no sé.
- Pero hay chances de que esté ¿no?

Pobrecita. No quería abrir los ojos. No quería aceptar que su mamá no iba a estar más. Escribo en tercera persona porque esa nena de 14 años ya no existe. Por suerte. O no. Un poco ilusa o un poco infantil. Un poco de las dos creo yo.

- Bueno está bien, chau tía.
- Chau mi amor te amo.

Al cortar el teléfono le cayó la ficha. ¿Esto de verdad estaba pasando? ¿De verdad se iba a morir? ¿Realmente nunca más iba a hablar con ella? Ella, pensando en las película, pensaba que iba a ocurrir un milagro. Que mágicamente iba a mejorar de a poco. O que de la nada iba a despertar lista para ir a comprarle su vestido y sus zapatitos para los 15. Pero no. Eso solo pasa en Estados Unidos. O las películas. Justo mi yo de 14 años no iba a tener esa suerte. Y no la tuve.

-Chau ma, te quiero mucho mucho, te llamo mañana.
-Yo también, un beso.

Esa fue la última conversación que tuvo ella con su mamá. Poco ella sabía, que iba a ser la última. Claro, nadie le había dicho que tenía leucemia. Nadie le había dicho que se iba a morir en unas semanas. Nadie le había dicho, que esa vez, es la ultima vez que ella iba a escuchar la voz de su mamá. ¿Como se dio cuenta esa nena?

- Hola tía, quiero hablar con mamá.
- Ehh... esta durmiendo...
- Ah no pasa nada, cuando se despierte decile que me llame.

Pobrecita. No sabía que nunca más iba a despertar. Que nunca más iba a tener a nadie a quien decirle "Mamá". Que se había acabado todo. Que ahora su vida iba a transcurrir en un departamentito sin ventanas en plena Capital Federal con un padre (semi) ausente. Pasaron como 4 horas. O más. No me acuerdo. "Tu mamá sigue dormida" me decían. Bueno, está descansando, le hace bien, nada de que preocuparse. 8 horas. Una noche. Una tarde. Y seguía sin despertar. Ya era preocupante. Hasta que aparecieron mi tía y mi papá con la verdad. Todo sobre como la familia esta para vos, que todos te aman, que te apoyan, que para lo que necesiten están, bla bla bla. Re bello todo, pero la mamá no me la devuelve nadie.

Viernes. Noche con amigas. Siempre sirve para animarse un poco. Pijama party entre 3, comida rica, juegos, charlas. Casi que te olvidas que se te esta por morir tu mamá. Mitad de la noche. Ella se levanto llorando, pero bajito para no despertar a las amigas. Con la mano en la cara para no mancharle la almohada a la que la invitó. "Tranquila, Cami, va a estar todo bien, andá a dormir". Ah no pero que hija de puta. Se le esta muriendo la mamá a tu mejor amiga y vos la mandas a callarse y a dormir. "Vos no entendes" quería decirle. "Se va a morir". Pero no le salieron esas palabras. Decir esas palabras era aceptarlo. Y si no lo aceptaba, no iba a pasar. Pero pasó. Igual pobre mi amiga, ella solo sabia que mi mama estaba internada, no que ya no se despertaba, ni que se iba a morir al cabo de unos días. Esos días, en la casa de esa amiga, fueron los días donde más lloré. O eso recuerdo.

Sábado a la tarde. Voy al hospital a visitarla. Me habían dicho que le dieron algo para sedarla y que no sufra mas dolor. AKA le hicieron una eutanasia con morfina. Cuando llegué estaba viva. Dormida, sin hablar ni sentir dolor, como desmayada, pero viva. Entré a la habitación, le di la mano y le dije lo mucho que la amaban. Los médicos me habían dicho que ella me escuchaba, así que tenía que hablarle mucho. Ahora que lo pienso, capaz me dijeron cualquiera como para que yo sienta que estaba hablando con ella y no me sienta tan mal. Capaz le hablé a las paredes. Pero yo le hablé igual. No perdía nada intentándolo.

Lunes. 3er año. Almorzando con mis amigas. "Y Cami que onda como esta tu mamá?". Claro. Que sabían ellas. Le preguntaron con las mejores intenciones. Ella no les había dicho nada de la morfina. "Está en coma". Silencio en la mesa como por 5 segundos "Uh, perdón". Igual no estaba en coma, estaba con morfina. Pero la Cami de 14 años no sabia explicar eso. Tenia que explicar que estaba muy mal de alguna forma pero no sabia como decirlo. Así que metió eso para que se entendiese la gravedad.

Otro sábado. Esta vez ella hizo como que no pasaba nada. Tarde de Sims 3. Un juego al que te hacías re adicta. Sale papá del cuarto. "Cami se murió mamá, lo siento mucho, veni a abrazarme". Pero ella no le fue a dar ese abrazo. No reaccionó. "Ok" le dijo. Porque para ella ya se había muerto cuando no le pudo volver a hablar. Cuando la tía le dijo que su mamá no iba a estar para su fiesta de 15. Cuando ya no atendía el teléfono y cuando la vio ese ultimo dia, viva por fuera y muerta por dentro. Ese 23 de noviembre de 2013 se murió mi mamá y yo perdí casi todo lo bueno que tenía. También perdí mi hogar y casi que pierdo mi escuela, y con ello casi que pierdo mis amigas. A mis amigas por suerte ahora las tengo. Tengo un hogarcito. Tengo familia que me ama. Pero nunca más voy a tener una mamá a quien llorarle y hacerle caprichito cuando estoy triste. Intente reemplazarla, buscar una figura materna en mi terapeuta y en mi tía. Por unos años funcionó pero ya está. Se acabaron los días de ser la nena pobrecita sin mamá. Ahora soy una adulta y entiendo que la vida es así y no puedo pretender que alguien me siga cuidando como me cuidaba ella. Ya está. A meterle garra no?



El que no siente no aprende

Con la muerte de una figura materna vienen cosas muy feas. A corto o a largo plazo. Tenés a corto plazo la repartición de bienes, el funera...